Quemaduras solares: Cómo prevenirlas y tratarlas en los meses cálidos
¡Hola, chicas! ¿Quién no quiere lucir una piel bronceada y radiante en verano? Pero, ¿a qué precio? Las quemaduras solares pueden arruinarnos las vacaciones y dejar marcas en nuestra piel. Pero no te preocupes, con unos sencillos trucos podrás proteger tu piel del sol y lucir un bronceado saludable y perfecto. En este artículo te contamos cómo prevenirlas y tratarlas en los meses cálidos.
Qué son las quemaduras solares y cómo se producen
¡Oh, las quemaduras! Esa molesta sensación de ardor y enrojecimiento en la piel que nos arruina el verano. Pero, ¿sabías que son más que una simple incomodidad? Las quemaduras solares son una lesión en la piel causada por una exposición excesiva a los rayos ultravioleta (UV). Estos rayos pueden dañar las células y causar enrojecimiento, dolor, picazón y, en casos graves, ampollas y descamación. Pero eso no es todo, la piel quemada también puede volverse más sensible a la luz durante varios días o semanas después de la exposición.
Entonces, ¿cómo podemos evitar estas molestas quemaduras? La mejor forma es protegerla de sus rayos. Esto implica aplicar protector con un factor de protección (FPS) de al menos 30, llevar indumentaria adecuada, como camisetas de manga larga y sombreros, y buscar áreas sombreadas durante las horas de máxima intensidad lumínica, generalmente entre las 10 a. m. y las 4 p.m. ¡No te arriesgues, chicas! Protégete del sol y luce un bronceado saludable y perfecto. Además, recuerda que la protección no es solo para los días soleados, los rayos UV pueden penetrar en la piel incluso en días nublados. Ahora que ya sabes cómo prevenir las quemaduras solares, ¡sigue leyendo para descubrir cómo tratarlas si te quemas!
Tengo la piel propensa a quemarme, ¿cómo puedo evitarlo?
Si eres de los que se queman con facilidad, no te preocupes, hay soluciones. Lo primero es elegir un protector solar adecuado. Busca uno con un factor de protección solar (FPS) mayor de 30 y que sea resistente al agua. Aplícalo generosamente en toda la piel expuesta al menos 30 minutos antes de salir al sol y no te olvides de volver a aplicarlo cada dos horas o después de nadar o sudar. Pero la protección no se limita solo al protector solar. También puedes usar ropa protectora, como camisetas de manga larga, pantalones largos y sombreros con ala ancha. Estos te ayudarán a proteger tu piel del sol. Y no te olvides de proteger tus ojos y la piel alrededor de ellos con gafas de sol con protección UV. Por último, evita la exposición durante las horas de mayor intensidad, generalmente entre las 10 a. m. y las 4 p.m. Si sigues estos consejos, podrás disfrutar del sol sin preocuparte por las quemaduras. Recuerda, es importante protegerse todo el año, no solo en verano.
Protectores solares que merecen la pena
Si eres sensible y propenso a las quemaduras, es fundamental que elijas un protector de calidad. Pero, con tantas opciones en el mercado, ¿cómo saber cuál es el mejor? Aquí te presentamos algunos protectores que merecen la pena.
- La Roche-Posay Anthelios XL: Este protector es ideal para quienes tienen sensibilidad cutánea gracias a su fórmula suave y no comedogénica. Además, su FPS de 50+ y su resistencia al agua lo convierten en una opción ideal para los días de playa o piscina.
- Neutrogena Ultra Sheer: Si buscas un protector ligero y no graso, este es tu mejor opción. Su fórmula se absorbe rápidamente y no deja residuo blanco. Además, su FPS de 50+ y su resistencia al agua lo hacen perfecto para cualquier actividad al aire libre.
- Hawaiian Tropic Sheer Touch: Si buscas protección con un toque tropical, este es el tuyo. Su delicioso olor a coco te transportará directamente a la playa. Además, su FPS de 30 y su resistencia al agua lo convierten en una opción perfecta para los días de verano.